Deben
estimular a sus hijos, ofreciéndoles la posibilidad de acceder al lenguaje
escrito, pero no clasificarlos, ni exigirles a todos
unos conocimientos iguales.
Los
niños comprenden que utilizar la escritura y la lectura sirve para
comunicar, para gozar y disfrutar con ella, la rechazan cuando se lo
imponen y si se los desmotiva con calificativos negativos.
SÍ a:
- Manejar mucha cantidad y variedad de material impreso: revistas, propagandas, libros, periódicos, recetas, poesías, prospectos médicos, cuentos, carteles de la calle,...
- Facilitar las iniciativas en las que les pidan material o ayuda para escribir y leer, dibujar, pintar,...
- Leer con sus hijos las producciones que hayan realizado (notas informativas, poesías, trabajos o proyectos,...) valorando siempre positivamente su esfuerzo.
- Hablarles muy claro y correctamente.
- Aceptar las producciones de sus hijos como su forma de comunicarse desde la etapa de lectoescritura en la que se encuentran y no como errores que han cometido.
- Tomarse un tiempo para leerles, especialmente lo que les gusta.
NO a:
Las valoraciones negativas sobre sus producciones escritas:
- Presionar o comparar las producciones entre sus hijos, ya que siempre hay que respetar el proceso natural e individual en el que se encuentran cada uno.
- Agobiarlos con el aprendizaje de la lectoescritura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario